ENTORNO MARINO

La costa de Granada se caracteriza por presentar una plataforma continental muy estrecha; tanto es así, que los barcos alcanzan el veril de los 50 metros a la media hora de zarpar.

ECOSISTEMAS

En los océanos se diferencian dos grandes regiones o dominios, el domino pelágico (región pelágica o pélagos) y el dominio bentónico (región bentónica o bentos). El primero comprende las aguas abiertas y el segundo el fondo marino.

En el DOMINIO PELÁGICO se diferencian dos regiones:

– Región nerítica: zona más próxima a la costa, sobre la plataforma continental. Se caracteriza por su alta productividad que, en el litoral granadino, es debida a que los vientos de poniente desplazan hacia el sur la capa superficial de agua, lo que propicia la llegada de agua profunda a la superficie, gracias a desplazamientos ascendentes verticales denominadas corrientes de afloramiento o upwellings.

– Región oceánica: zona más alejada de la costa, que se extiende sobre los taludes continentales y las llanuras abisales, cubriendo aproximadamente un 70% de la superficie terrestre y en ella se encuentra prácticamente toda el agua líquida del planeta. Esta región tiene una gran importancia en la vida del planeta ya que regula el clima y condiciona la atmósfera.

Fuente: Luis Sánchez Tocino.

Los organismos pelágicos poseen una gran diversidad de formas y tamaños, desde aquellos microscópicos, como los virus, hasta el mayor animal que ha existido, la ballena azul. Dentro de ellos podemos diferenciar los que son arrastrados por las corrientes, el plancton, y los que se desplazan de una manera activa, independientes de las corrientes, el necton

Fuente: Luis Sánchez Tocino.

El plancton comprende todos aquellos organismos que son arrastrados por las corrientes. En general se tiene la idea de que son de pequeño tamaño, sin embargo algunos animales, como diferentes especies de medusas, pueden superar el metro de longitud y los sifonóforos los 10 m.

Al plancton de naturaleza vegetal se le denomina fitoplancton y zooplancton al animal.

Fuente: Luis Sánchez Tocino.

El fitoplancton, está formado por algas unicelulares, que pueden ser libres o formar colonias, y bacterias fotosintéticas.

El zooplancton está formado por animales unicelulares y pluricelulares. Su tamaño acostumbra a ser mayor que el del fitoplancton, del cual se nutre. Está formado por una gran variedad de organismos como crustáceos, medusas, huevos y larvas de diferentes invertebrados y peces.

El plancton no se encuentra sólo en las aguas superficiales, hay a todos los niveles. Algunas especies se pasan la vida realizando movimientos verticales o nictemerales, durante el día, huyendo de la luz, descienden a zonas más profundas, mientras que ascienden durante la noche, en busca de alimento, a niveles menos profundos con una mayor biomasa. Estos movimientos favorecen el transporte de energía a las capas más profundas.

Como necton se conoce a aquellos organismos capaces de desplazarse independientemente de los movimientos del mar. A este grupo pertenecen los moluscos (cefalópodos), peces, tortugas marinas, aves (pingüinos) y mamíferos (cetáceos y pinnípedos).

Fuente: Luis Sánchez Tocino.

Muchos animales del necton se reúnen en bancos constituidos por individuos de tallas similares y que se desplazan de forma coordinada. Estas agrupaciones pueden ser por motivos tróficos, reproductivos, defensivos y también para beneficiar el hidrodinamismo.

Los principales peces pelágicos que forman parte del necton son: sardina, caballa, boquerón, atún, jurel, palometa, etc

El DOMINIO BENTÓNICO comprende el fondo de los mares y océanos. En el litoral granadino comprende tanto ambientes arenosos como ambientes rocosos.

Fuente: Luis Sánchez Tocino.

Las zonas arenosas menos profundas, en apariencia desoladas, acogen a numerosas especies marinas. Las comunidades de costa arenosa alojan una fauna y flora más pobre que las de costa rocosa, o por lo menos, más difícil de observar, ya que todo se encuentra “escondido”.

Fuente: Luis Sánchez Tocino.

Las zonas arenosas constituyen el hogar de gran cantidad de organismos que han adaptado su vida a permanecer enterrados en la arena.

Fuente: Luis Sánchez Tocino.

Es en estos lugares donde se observan las fanerógamas marinas (plantas superiores) que facilitan el establecimiento de toda una fauna asociada, tanto de peces como de invertebrados marinos, que difícilmente podrían vivir sin este escondrijo ideal y de los recursos que les ofrece su existencia.

Fuente: Luis Sánchez Tocino.

Por su parte, los ambientes rocosos de poca profundidad, y cercanos igualmente a la costa, contienen una gran cantidad de grietas, que sirven de refugio para muchos organismos. Estas zonas se caracterizan por sus aguas transparentes altamente oxigenadas, donde se encuentra una vegetación fotófila, representando un ámbito con un alto grado de heterogeneidad biológica.

Fuente: Luis Sánchez Tocino.

Los animales de estos ambientes desarrollan mecanismos de defensa, como las espinas asociadas a glándulas venenosas, o como la adopción de colores crípticos (parecidos a los del medio). Las comunidades que habitan estas zonas son muy territoriales y buscan incesantemente los orificios hechos por otros organismos bentónicos para su protección.

Fuente: Luis Sánchez Tocino.

Una vez traspasada la plataforma continental, mar adentro, los fondos arenosos o fangosos presentan, en determinadas zonas, unas formaciones denominadas por el sector pesquero como “secos”. Se trata de unas elevaciones localizadas en zonas profundas, consideradas como caladeros importantes ricos en recursos pesqueros demersales de apreciable interés comercial.

Existen tres secos de interés en el litoral granadino: el “Seco de Motril” (Dijbouti), el “Seco de Torrox” (Avempace) y el “Sequillo” (El Idrisi), montes de origen volcánico que se agrupan en una extensa y suave meseta, usados por muchas especies sedentarias como hábitat, en los que proliferan ecosistemas de alto valor ecológico y por ello caladeros de gran interés pesquero, donde habitan especies tan importantes desde el punto de vista comercial como las famosas “Quisquillas de Motril» (Plesionika edwardsii), denominadas carabineros por los pescadores locales.

Fuente: Instituto Español de Oceanografía

Textos adaptados fuentes: Diputación de Granada y https://litoraldegranada.ugr.es